¡A la Guelaguetza 2013! ¡Al fin puedo ir nuevamente y pasearme a mis anchas!...





¿Ir a otro concierto de Lila Downs y Susana Harp?...¡Claro!...



Sólo fue eso...






Basta sentir
una astilla
para recordar
el doloroso
aguijón
de las soledades.
Entonces
el corazón se te vuelve
espuma,
suavidad con deseo
de retorno.
Y no deseas tu propio dolor
ni el de los otros,
te vuelves milagroso
cohorte de falanges
que bailan
de contento fallido
para atrapar
las soledades de otros.
No hay milagros
que atrapen espuma
entonces
el corazón empieza
a escurrirse.



Shasha...
13/06/13

*Todos los derechos reservados para el autor.

Maravilloso...





  





Slava Snowshow...

La melancolía del humor...
Lo he disfrutado como una mujer vuelta niña. 
¡Hasta un algodón de azúcar rosa, me comí!







Más allá del tiempo...



Oceransky...Quesada...TigreGil...Rojas...
(En concierto el 25 del pasado mes de mayo, pasé un buen momento.)





¡El primogénito y el amoroso papá!...


Lorca y Cohen...




Pequeño Vals Vienés




En Viena hay diez muchachas,

un hombro donde solloza la muerte

y un bosque de palomas disecadas.
Hay un fragmento de la mañana
en el museo de la escarcha.
Hay un salón con mil ventanas.
¡Ay, ay, ay, ay!
Toma este vals, este vals,
este vals con la boca cerrada.

En Viena hay cuatro espejos
donde juegan tu boca y los ecos.
Hay una muerte para piano
que pinta de azul a los muchachos.
Hay mendigos por los tejados,
hay frescas guirnaldas de llanto.
¡Ay, ay, ay, ay!
Toma este vals, este vals,
este vals que se muere en mis brazos.

Este vals, este vals, este vals, este vals,
de sí, de muerte y de coñac,
que moja su cola en el mar.
Porque te quiero, te quiero amor mío,
en el desván donde juegan los niños,
soñando viejas luces de Hungría
por los rumores de la tarde tibia,
viendo ovejas y lirios de nieve
por el silencio oscuro de tu frente.
¡Ay, ay, ay, ay!
Toma este vals, este vals,
este vals de quebrada cintura.

Este vals, este vals, este vals, este vals,
de sí, de muerte y de coñac,
que moja su cola en el mar.

En Viena bailaré contigo
con un disfraz que tenga cabeza de río.
¡Mira qué orillas tengo de jacintos!
Dejaré mi boca entre tus piernas,
mi alma en fotografías y azucenas,
y en las ondas oscuras de tu andar.
Quiero amor mío, amor mío, dejar
violín y sepulcro, las cintas del vals.
Quiero amor mío, amor mío, dejar
violín y sepulcro, las cintas del vals.
¡Ay, ay, ay, ay!
Toma este vals, este vals,
este vals del "te quiero siempre".

Este vals, este vals, este vals, este vals,
de sí, de muerte y de coñac,
que moja su cola en el mar.

Este vals, este vals, este vals, este vals,
de sí, de muerte y de coñac,
que moja su cola en el mar.

Porque te quiero, te quiero amor mío,
en el desván donde juegan los niños,
soñando viejas luces de Hungría
por los rumores de la tarde tibia ...

Federico García Lorca...

(*) Leonard Cohen tradujo esta letra al inglés para musicalizarlo con ritmo de vals.

Mi canción infantil... Lorca y Camarón de la Isla...

La Tarara, sí;
la tarara, no;
la Tarara, niña,
que la he visto yo.

Lleva la Tarara
un vestido verde
lleno de volantes
y de cascabeles.

La Tarara, sí;
la tarara, no;
la Tarara, niña,
que la he visto yo.

Luce mi Tarara
su cola de seda
sobre las retamas
y la hierbabuena.

Ay, Tarara loca.
Mueve, la cintura
para los muchachos
de las aceitunas.

Federico García Lorca...